jueves, 19 de marzo de 2009

Carcassone - Sur de Francia

Carcassone, una cita con el Medievo. Puente San José 2009

Con muchísimas ganas e ilusión nos hemos animado a ir un poco más lejos y esta vez hemos pasado las Landas y nos hemos adentrado en el Sur de Francia, con destino a la ciudad amurallada de Carcassone, Languedoc, Rosellón. Un lugar idílico para un viaje de relax, que te transporta a otra época, dóndo todo está cuidado al más mínimo detalle.

El viaje se ha hecho un poco largo y hemos parado a medio camino en un área de descanso de la zona Francesa a estirar las piernas y a merendar. Tras mirar la zona de autocaravanas situada debajo del castillo y no convercernos mucho, hemos decidido entrar al camping que se encuentra justo en las faldas del castillo. Nos imaginamos que en verano esta zona estará a tope más que nada por toda la zona verde que le rodea, pero ahora estaba bastante desolado.

Un lugar tranquilo, sin mucha gente, mayoritariamente jubilados extranjeros con unas superautocaranas, éstos eran los únicos inquilinos del camping La Cite.
 
Aprovechamos el bonito atardecer para dar una vuelta por un paseo paralelo al río, consta de kilómetros y es ideal para hacerlo en bicicleta. Por el camino nos encontramos con parques para ejercitar diferentes partes del cuerpo, muy típico en Francia y tras probar todos ellos continuámos con el paseo por el canal du Midi, un paseo tranquilo flanqueado por árboles cuyas ramas caen como lágrimas hasta el agua. Decidimos dejar para el día siguiente la visita al castillo y la ciudadela de Carcasona, así que tras anochecer, duchita, cena y a descansar. Para una futura ocasión apuntamos también el paseo por el Canal du Midi, para hacerla con bicicletas cuando los niños fueran más mayorcitos.

Por la mañana nos dirigimos a subir al castillo, situado en una cima fortificada por los romanos. No había mucha gente a primera hora de la mañana así que pudimos pasear, hacer fotos y fantasear con sus calles con total tranquilidad. El  castillo ha sido restaurado por el arquitecto Viollet-le-Duc. Esta restauración ha sufrido innumerables críticas por haberla realizado sin ninguna fidelidad histórica, pero fiel o no  he de reconocer que es la arquitectura medieval más bonita que he visitado.

La fortificación consiste en un anillo doble de murallas y 53 torres y desde 1997 está considerada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. La visita merecó la pena.

Recorremos sus murallas, torres y diferentes puertas de entrada, Allí se respira el encanto de la verdadera ciudad medieval y acabamos cómo no, deambulando por la cantidad de tiendecillas y reclamos para los turistas,estrechas calles llenas de tiendas de souvenirs.
Así de esta forma tan tranquila y agradable ha transcurrido este puente de San José.



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